Este acontecimiento quedará marcado en la historia de nuestra localidad y se sumará a otras fechas señaladas para nuestro pueblo, como el 2 de octubre de 1886, primer curso escolar del instituto Fernando Blanco, o el 16 de octubre de 1997, inauguración del hospital comarcal Virxe da Xunqueira». De este modo, y en el estand de Turespaña en Fitur, presentaba la alcaldesa de Cee, Margot Lamela, el que será uno de los acontecimientos más destacados para la localidad en los últimos años: un Año Jubilar mariano que concluirá el 1 de mayo de 2023 con la coronación canónica de la imagen de la patrona. «Somos referente educativo, sanitario, cultural, empresarial, comercial, deportivo, cultural… Y seremos también lugar de encuentro durante este año», añadió Lamela, que repasó brevemente ante los presentes —entre ellos, la ministra Reyes Maroto— la historia de Cee.
Ese Año Jubilar, que será parcialmente compartido con el Xacobeo 2021-2022, arrancará el próximo 1 de mayo con la apertura de la puerta santa y a partir de ese momento se sucederán multitud de actos «culturales, filosóficos, folklóricos, históricos, caritativos o sanitarios», resumió el párroco Désirée Kouakou, que también participó en la promoción ceense en la feria de turismo de Madrid. «Seremos lugar de peregrinación, con la recepción en verano de 1.200 jóvenes», añadió el sacerdote, que también elogió el estilo de vida de la Costa da Morte.
Ese concepto fue desarrollado más tarde en un vídeo promocional narrado por el actor Toño Casais, que recorrió la historia reciente de la villa y sacando pecho de esas nuevas generaciones que eligen Cee para vivir: «Son nuestro motor, sin ellas no tendría sentido».
El Año Jubilar fue presentado a lo largo de los últimos meses ante las Administraciones para solicitar apoyo de cara a su celebración, y mismamente en esta edición de Fitur el delegado territorial de la Xunta, Gonzalo Trenor, comprometió el apoyo del Gobierno gallego.
No será fácil, pero parroquia, Concello y fieles trabajan mano a mano para que el año de actividades que está por venir salga según lo previsto. Por lo pronto, ya ha sido encargada la pieza que le será colocada a la Virgen durante la coronación. La hará el orfebre sevillano Fernando Marmolejo Hernández, tercera generación de un linaje de artesanos y autor, entre otras, de la corona que hace poco le fue puesta a la Virgen de O Corpiño. Marmolejo se confesó «emocionado» y «contento» por el importante encargo en una grabación de voz que pudo escucharse durante la presentación oficial del Año Jubilar, el pasado diciembre. «Lo primero que hice fue ir a Cee para ponerme delante de la Virgen y recibir su inspiración y mensaje», señaló el orfebre.
Para ayudar a financiar la pieza, desde la parroquia apelan a la solidaridad de los fieles y les animan a donar «esas piezas de oro que todos tenemos desparejadas por casa». Las aportaciones económicas, claro está, también serán bien recibidas y con cada aportación se expedirá un certificado para los que deseen aprovecharse de beneficios fiscales ante Hacienda.
La madrina
Una histórica entidad cuya fundación se remonta a hace más de cinco siglos ha accedido a amadrinar las celebraciones. Se trata de la Hermandad de la Macarena, una agrupación de advocación mariana que se remonta a finales del siglo XVI y cuyo prestigio es reconocido nacional e internacionalmente.
Será, sin duda, un importantísimo episodio para la villa de Cee, una localidad «surgida en la baja Edad Media, cuando empezó a forjarse en los alrededores de un juncal una población de pescadores», dijo la alcaldesa en Fitur, y que demostró a lo largo de los siglos fortaleza y unión para sobrellevar acontecimientos tan trágicos como la quema de la iglesia durante la invasión francesa. «Fue un durísimo golpe del que el pueblo salió más fuerte», dijo Margot Lamela, al tiempo que explicó que la talla de la Virgen reconstruida entonces es la misma que llegó hasta nuestros días.
Lugar de encuentro
Ilustres vecinos dio Cee, como el arquitecto Domingo Antonio de Andrade, autor de la Berenguela compostelana y merecedor de un reciente homenaje por parte de la Real Academia Galega de Belas Artes; e ilustres visitantes se acercaron a lo largo de los tiempos a la localidad para admirarla y rendir culto a su patrona, que hará de la villa un «lugar de encuentro y peregrinación» los próximos meses.
«Somos la primera ventana al mar para los peregrinos que hacen el Camiño Xacobeo al fin del mundo»
Cada año, tras rendir culto al Apóstol en Santiago de Compostela, un buen número de caminantes deciden continuar con su peregrinación dirigiéndose a los confines de la tierra, a Fisterra, en una experiencia descrita por muchos como «mágica» y que trasciende lo meramente espiritual. Una «reconexión» con el pasado y una preparación al futuro.
En ese último empujón a pie, es en Cee en donde los caminantes se embelesan con esa primera visión del océano, en concreto a la altura del Cruceiro da Armada, desde donde se puede contemplar una espectacular panorámica en la que el Cabo Fisterra es el absoluto protagonista. Un poco antes, en el Monte de San Pedro Mártir, una coqueta ermita y una fuente milagrosa para los dolores de reuma, pies y verrugas que antaño perteneció a los Trastámara.
Después de esa «primera ventana al mar», tal y como describió la alcaldesa en Madrid, los peregrinos bajan al casco urbano, dotado de todos los servicios necesarios para un breve descanso o para hacer noche en la localidad. Y en pleno centro, la iglesia de Nosa Señora da Xunqueira.
Fuente: La Voz de Galicia
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